Casi sin darnos cuenta hemos llegado a la entrada número 100.
Este espacio comenzó como un rinconcito en el que hablábamos de un ámbito concreto dentro de una disciplina por «explotar» como es el daño cerebral adquirido en la terapia ocupacional.
Al principio pensé que me leerían muy poquitas personas, pero poco a poco se ha ido creando una comunidad alrededor del blog de la que me siento muy orgullosa. Entre los que leeís estas líneas hay como es lógico muchos terapeutas ocupacionales, pero también familiares y afectados por daño cerebral, fisioterapeutas, neurólogos, médicos rehabilitadores, enfermeras, neuropsicólogos, periodistas, trabajadores sociales…
Este blog es el cemento que une personas de disciplinas muy diferentes pero que tienen un interés común, y es lo que más fuerza me da para continuar escribiendo. ¡A por muchas más!
Gracias por estar ahí.