Hace días apuntaba un noticiario que el éxito de taquilla de "Avatar" se debía en parte a que un alto porcentaje de espectadores acudía de nuevo a verla, algunos hasta varias veces. Ese afán de repetición, decían, se debía a una sensación de difusa melancolía que invadía a las personas cuando abandonaban el cine, la cual mitigaban volviendo otra vez: la película tenía efecto adictivo, completaba el locutor. Como empecé a prestar atención a la noticia bien mediada ésta, no llegué a saber cuánto de fundamento científico la avalaba.
El caso es que, aunque inicialmente no estaba tentada de ir al cine,