Abundan las malas actitudes y los pensamientos negativos entorno al dinero que impiden el aumento de la fortuna. Cada persona es responsable de su riqueza en cuanto comprende que el dinero en sí es una energía sometida al flujo de los cambios y que, dependiendo de su propia opinión acerca de él, establece una base que va a condicionar su suerte.
Tres ideas nefastas que no atraen dinero:
* El dinero es malo, sucio.
* Toda la gente rica es corrupta y desprecia a los demás.
* Yo quiero ganar dinero porque me lo merezco más que esos.
Estas ideas están contaminadas, en el fondo, por la envidia y la creencia “yo soy mejor que los otros”.
Al contrario, tres ideas que ayudarán a crear prosperidad porque se trata de afirmaciones que buscan la armonía y postulan a favor del lado positivo de la conciencia:
* El dinero es útil para mí y los que me rodean.
* Soy generoso con mi dinero.
* No voy a envidiar la suerte ni la fortuna de nadie. No voy a juzgar a alguien por poseer más que yo. Pues no conozco realmente a esa persona.
Efectivamente, el dinero es una energía que debe atraerse con la actitud, una energía que –como tal- debemos ayudar a circular para que no se estanque y bloquee nuestro camino a la prosperidad.
Fuente: Jordi Milian – Coaching