Inteligencia emocional

Inteligencia emocional, es la capacidad de sentir, entender, controlar y modificar estados anímicos propios y ajenos.
Las emociones son la clave de muchos éxitos y de muchas derrotas, nacemos con unas y aprendemos otras a lo largo de la vida y gracias al lenguaje, estas emociones se van haciendo mas complejas y mas variadas tanto que hay momentos donde no reconocemos la emoción que estamos sintiendo.
Existen 6 categorías básicas de emociones.

• MIEDO: Anticipación de una amenaza o peligro que produce ansiedad, incertidumbre, inseguridad.
• SORPRESA: Sobresalto, asombro, desconcierto. Es muy transitoria. Puede dar una aproximación cognitiva para saber qué pasa.
• AVERSIÓN: Disgusto, asco, solemos alejarnos del objeto que nos produce aversión.
• IRA: Rabia, enojo, resentimiento, furia, irritabilidad.
• ALEGRÍA: Diversión, euforia, gratificación, contentos, da una sensación de bienestar, de seguridad.
• TRISTEZA: Pena, soledad, pesimismo.

Si tenemos en cuenta esta finalidad adaptativa de las emociones, podríamos decir que tienen diferentes funciones:
• MIEDO: tendemos hacia la protección.
• SORPRESA: ayuda a orientarnos frente a la nueva situación.
• AVERSIÓN: nos produce rechazo hacia aquello que tenemos delante.
• IRA: nos induce hacia la destrucción.
• ALEGRÍA: nos induce hacia la reproducción (deseamos reproducir aquel suceso que nos hace sentir bien).
• TRISTEZA: nos motiva hacia una nueva reintegración personal.

Este tema da para mucho, hay mucho que aprender de las emociones pero yo quiero centrarme en ¿como? Es muy simple, que sea difícil o fácil dependerá de lo desarrollada que tengas esta capacidad. Quiero Mostar un proceso de inteligencia emocional, ¿puedes adivinar que emoción siente antes de que termines de leer?
Es en esos segundos donde me levanto del sofá y voy hacia la cocina, no tengo hambre pero siento la necesidad de sentirme bien, sin darme cuenta tengo una bolsa de papas en mi mano. Y gracias a la reflexión se inicia el proceso el cual llamamos inteligencia emocional.
Sentir quiero sentirme bien, entender que sentirme bien no es lo mismo que tener hambre, controlar cambiar la acción que se ha convertido en un hábito que me dice que para sentirme bien tengo que comer, entrar en una reflexión interna y buscar saciar esa necesidad con una acción diferente y constructiva ejemplo: Hablar con alguien, dar un paseo, pintar un cuadro, ver una película.

Modificar mientras camino hacia la tienda de arte para comprar mis primeros pinceles y pinturas, me doy cuenta del cambio, me tomo unos segundos para apreciar el resultado veo hacia donde voy y lo que voy hacer, algo nuevo y diferente, mi emoción ha cambiado, la ansiedad se ha trasformado en ilusión.

Era eso lo que quería decirme esa emoción había algo dentro de mi que no estaba satisfecho, y por ilógico que parezca pensé que era hambre, pasaba tantas horas frente al televisor que aceptaba el primer pensamiento que pasaba por mi mente.

De no iniciar el proceso llamado inteligencia emocional habría comido esa bolsa de papas, la necesidad no estaría saciada, lo cual probablemente me habría echo volver mas tarde a la cocina por algo mas que picar y dentro de unos meses ganaría 2 kilos mas, con el tiempo me sentiría a un peor, estaría desorienta y confundida.

He aprendido que comunicarnos con los demás es importante, pero es mucho más importante comunicarse con uno mismo. La finalidad es entender que es lo que quiero y necesito y como puedo satisfacerlo sin hacerme daño. Ahora se que estaba deprimida y aburrida pasaba demasiado tiempo frente al televisor y necesitaba hacer algo distinto, pintar ha sido una buena idea, también lo hubiera sido hablar con un amigo, o dar un paseo.
Respuesta: TRISTEZA: nos motiva hacia una nueva reintegración personal.