Terapia Psicológica y adultos con TDAH
*Jorge Orrego Bravo, psicólogo chileno/español, precursor en la psicoterapia y Coaching del déficit de atención/hiperactividad en adultos en España, E-mail: jorge.orrego@atencion.org
Página web: www.atencion.org
La terapia psicológica en adultos con TDAH debe cumplir diferentes propósitos. Por un lado, adaptar el entorno del individuo para conseguir que se ajuste a sus posibilidades y minimizar los obstáculos que presenta. Por otro lado, se debe centrar en ayudar al individuo a desarrollar hábitos de conducta y estrategias que le permitan realizar con éxito sus tareas cotidianas, obligaciones, proyectos y planes. Estos dos propósitos llevan implícito un tercero, la disminución de los niveles de ansiedad y de estrés (78).
El TDAH, es un trastorno que puede afectar al funcionamiento del sujeto en diferentes ámbitos de la vida. Ante esta realidad, la intervención psicoterapéutica, debe iniciarse valorando en que ámbito o ámbitos se concentrará. La presentación del trastorno varía en función del sexo del paciente, la edad, la situación personal y laboral del mismo y la presencia de comorbilidad con otros trastornos.
Las diferencias individuales en función del sexo han sido ampliamente estudiadas. En la vida adulta los hombres con TDAH, presentan más dificultades en el ámbito de la socialización y mantienen, en ocasiones, estilos de interacción disfuncionales. Otro de los ámbitos en que debe centrarse la terapia para adultos es el ámbito laboral. Los sujetos con TDAH, suelen presentar un historial laboral con un elevado número de cambios que pueden ser motivados por una insatisfacción por parte del sujeto, o bien por despidos que se basan en equivocaciones, falta de atención, olvidos de citas o clientes, incumplimiento de horarios, falta de entrega de proyectos dentro del plazo establecido, o bien por problemas de relación con compañeros o superiores.
Por otra parte, es importante valorar las repercusiones que la presencia crónica de la sintomatología ha tenido en el sujeto a lo largo de su vida. Estos individuos han internalizado una larga lista de errores y de fracasos que han ido erosionando su autoconfianza y autoestima, por lo que no se consideran personas eficaces en diferentes áreas. La psicoterapia debe focalizar sus esfuerzos en reforzar la autoconfianza del sujeto para producir cambios y generar recursos válidos que le faciliten su vida cotidiana. Muchas de las creencias que presentan los adultos con TDAH, provienen de la anticipación del fracaso por parte de los otros y de uno mismo.
Otra de las cuestiones a tener en cuenta ante el planteamiento de un abordaje terapéutico, es el conocimiento que el propio sujeto tiene de su enfermedad. Cuando un sujeto desconoce que padece un trastorno, suele pensar que él es el responsable de todas sus dificultades actuales y pasadas. Las dificultades que constituyen los criterios diagnósticos del TDAH, son entendidas por el sujeto que las ha estado padeciendo a lo largo de la vida, como características de su personalidad. El entorno familiar, laboral y social del sujeto, se ve perjudicado por toda la desorganización del sujeto pero, probablemente, el sufrimiento mayor se debe de nuevo al desconocimiento de lo que le ocurre a su pareja, compañero o amigo.