Robert Dilts, uno de los principales exponentes de la PNL, modeló a Walt Disney. Estudió sus escritos, miró películas de él trabajando y entrevistó a personas que trabajaron con él. De ahí extrajo el Modelo de Creatividad de Disney.
Dilts concluyó que Walt Disney se movía en tres estados distintos cuando producia su trabajo. Dilt los ha llamado Soñador, Realista y Crítico. Cada una de estas tres etapas tienen una fisiología y patrones distintos de pensamiento y pueden ser conscientemente empleados por personas que quieran mejorar su creatividad.
El soñador En esta fase se exponen todas las ideas que nos vengan a la mente, no importa cuan locas o imposibles sean. Aquí no existen la moral, la lógica o los puntos de vista. Todo es válido. El soñador debe servir como una visión global del trabajo o proyecto a realizar. Disney decía: «Quien fabrica la historia debe ver claramente en su propia mente cómo cada pieza dentro del negocio de la historia, estará colocada».
El realista Esta es la fase del análisis. Aquí se plantean las ideas de la fase anterior y se descartan las que no sirvan al proyecto. Quizás sea necesario en algunos puntos volver a la fase anterior para modificar algunas ideas que no se adapten completamente al proyecto a realizar. Damos el paso desde ver la historia completa, a asociarnos completamente a la experiencia. Disney decía: «Él debería sentir cada expresión, cada reacción».
El crítico Aquí se evalúa qué es lo que hace falta en nuestro proyecto y cuales son los puntos de vista que no se tuvieron en cuenta. Esta fase sirve para descubrir las faltas de las etapas anteriores. Desde esta posición tendrás la distancia suficiente para darle otra mirada. Disney decía: «Él debe alejarse lo suficiente de esta historia para echarle una segunda mirada».
Este proceso no es lineal, sino que funciona de una forma circular. Esto quiere decir que no basta con pasar una vez por cada una de estas etapas para formular un proyecto, sino varias veces. El soñador debe soñar, el realista debe evaluar y el crítico debe mejorar. Estas son las funciones de cada una de estas fases, y si se siguen de esta manera nuestro proyecto pronto forma
Dilts concluyó que Walt Disney se movía en tres estados distintos cuando producia su trabajo. Dilt los ha llamado Soñador, Realista y Crítico. Cada una de estas tres etapas tienen una fisiología y patrones distintos de pensamiento y pueden ser conscientemente empleados por personas que quieran mejorar su creatividad.
El soñador
En esta fase se exponen todas las ideas que nos vengan a la mente, no importa cuan locas o imposibles sean. Aquí no existen la moral, la lógica o los puntos de vista. Todo es válido. El soñador debe servir como una visión global del trabajo o proyecto a realizar. Disney decía: «Quien fabrica la historia debe ver claramente en su propia mente cómo cada pieza dentro del negocio de la historia, estará colocada».
El realista
Esta es la fase del análisis. Aquí se plantean las ideas de la fase anterior y se descartan las que no sirvan al proyecto. Quizás sea necesario en algunos puntos volver a la fase anterior para modificar algunas ideas que no se adapten completamente al proyecto a realizar. Damos el paso desde ver la historia completa, a asociarnos completamente a la experiencia. Disney decía: «Él debería sentir cada expresión, cada reacción».
El crítico
Aquí se evalúa qué es lo que hace falta en nuestro proyecto y cuales son los puntos de vista que no se tuvieron en cuenta. Esta fase sirve para descubrir las faltas de las etapas anteriores. Desde esta posición tendrás la distancia suficiente para darle otra mirada. Disney decía: «Él debe alejarse lo suficiente de esta historia para echarle una segunda mirada».
Este proceso no es lineal, sino que funciona de una forma circular. Esto quiere decir que no basta con pasar una vez por cada una de estas etapas para formular un proyecto, sino varias veces. El soñador debe soñar, el realista debe evaluar y el crítico debe mejorar. Estas son las funciones de cada una de estas fases, y si se siguen de esta manera nuestro proyecto pronto forma