Una vez me llamó mucho la atención un estudio sobre el miedo realizado ente miles de personas en EEUU. ¿ Y sabes por qué? porque pese a lo que se podría suponer, el miedo a la muerte es el nº 2 en el ranking.
Y entonces, ¿cual es el nº 1? el miedo a hablar en público.
Así que como es más que probable que alguna vez tengas que hablar en público, y mucho más si eres líder, empresario, respresentante de colectivos, coach, formador, político, profesor, etc, aquí van varios sabios consejos que da Ferrán Ramón Cortés y que me parecen muy útiles para gestionar el miedo escénico. Vamos allá:
1. Realizar ejercicios de respiración profunda unos minutos antes de la intervención
2. No repasar el guión ni pensar en los contenidos en los 10 minutos previos; lo que sabemos ya lo sabemos. lo que olvidemos, nadie lo echará en falta
3. No pensar en «cómo lo tengo que hacer». Confiar en nuestros recursos internos, que previamente hemos entrenado.
4. Relajarse: rememorar una situacion agradable, pensar en una persona querida, sentir emociones positivas
5. No tener prisa por empezar. Tomar posesión del espacio escénico y mirar a la gente antes de pronunciar la primera palabra.
6. Un ejemplo: la película «El discurso del rey», dirigida en 2012 por Tom Hooper y protagonizada por Colin Firth. Constituye un testimonio excepcional de como vencer el pánico escénico. Y es un caso basado en la realidad
Y ahora añado de mi cosecha otras estrategias que uso habitualmente y que me han ayudado mucho:
1. Me repito que sobre el tema que voy a hablar, soy la persona que más sabe de la sala (por algo estoy ahí)
2. Aprendido de ese extraordinario formador que es Germán González, antes de entrar respiro hondo y me digo que les quiero, que siento amor por la gente que va a escucharme y que les voy a ofrecer lo mejor que llevo dentro
3. Aprendido de Gustavo Bertolotto: cuando voy a salir, para no sentir la presión de hacerlo bien, de ser sistemático y que no se me olvide nada, me digo la siguiente frase: «Y una vez llena la barrica de conocimientos, ábrase la espita, y déjese fluir».
(y si encima has preparado tu intervención con esmero y tiempo, no hay nada que de más seguridad que eso:. así que prepara y entrena)
Pues aqui los tienes, y ahora que ya los sabes, se trata también de usarlos 🙂
¡Que te sean útiles!
Fuente: Somos profesionales del coaching