Repasando y actualizando unas revistas antiguas (me gusta hacerlo de vez en cuando), he descubierto, o mejor, redescubierto un artículo de Esperanza Borús que viene a cubrir una duda que llevaba semanas en mi cabeza. Me sonrío porque parece que cuando estás buscando algo y lo haces por la vía adecuada, te llega de alguna manera y se pone en tu camino para servirte de instrumento en tu quehacer vital. Sigo teniendo asombro al ver que las cosas tienen una razón para que pasen, aunque a veces no lo entendamos; tal vez sea porque hemos de aprender o aprender, y si nos negamos a hacerlo nos siguen pasando, como el recorrido de una noria…hasta que aprendamos.
Por esto necesitaba, buscaba ideas para ver cómo enfocar a un paciente la orientación sobre el desencanto del alma en estos tiempos de crisis profundas, no sólo económicas, laborales, etc., sino crisis internas, del interior del ser humano que amenaza con destruirlo hasta en su propia escala de valores éticos y morales. Y ahí estaba,…abierto, para que lo releyera y lo reflexionara en mi intención de dar pistas para la reflexión a mi cliente desorientado.
”No te entregues a imaginaciones, sino entrégate al momento siendo práctico…El vagabundeo mental, las asociaciones mecánicas, el ir y venir sin rumbo de los pensamientos, la distracción constante, la inclinación mórbida de la mente a quedar fija en acontecimientos pasados, repitiendo los recuerdos como en una moviola, la tendencia a proyectarse hacia el futuro…nunca ofrecen una solución práctica a los problemas reales, sino que por el contrario son un escape del momento presente, nublando la razón y convierten la vida del hombre en una vida imaginada.No permitas, pues, que tu mente, que es un instrumento precioso cuando se sabe usar, te aleje del Presente Sagrado y te impida vivir. Ten en cuenta que quien no conoce el presente no vive la vida, únicamente la sueña…
…No te entregues a la queja, a la autocompasión ni a las emociones negativas, por el contrario admira la vida y agradece su generosidad…Ya te habrás dado cuenta de que los consejos que te doy van contra tus viejos hábitos, bien se traten de hábitos mentales, emocionales o de conducta. Y sé que solamente seguirás mis sugerencias cuando llegues a comprender que todo ello (tus viejos hábitos) te acarrea muchas desdichas…
…Abandona el vicio tan común de la queja constante y no te hagas cómplice de las emociones negativas desgastantes. Aunque no lo creas así, ellas no son tu fuerza sino tu debilidad. No te atormentes por nimiedades pasajeras ni ofensas a tu ego. Guarda toda tu energía para resolver problemas reales, no imaginarios…
…La bondad y la nobleza de tu corazón harán de tí un ser humano libre. Si en tu bondad hay debilidad, te convertirás en un animal de carga. No pienses en la bondad como un estado de constante concesión a las necesidades o caprichos del prójimo. No llames bondad a lo que no es más que temor o debilidad. Ayuda siempre que te sea posible, pues ese es el ritmo del amor, ser feliz y hacer felices a los demás, pero no permitas que la carga que pertenece al otro sea cargada a tus espaldas.
…Ábrete al instante, permanece tranquilo. Recuerda que la prisa es un tóxico de la vida interior.”
Fuente: TERAPIA Y FAMILIA