Actualmente muchas de las personas que atendemos en el CTC nos hablan de las dificultades que se encuentran tras un proceso migratorio.
A menudo, explican cómo se sienten desorientados a la hora de construir una identidad que aúne las dos culturas, la de orígen y la de acogida: nuevas y viejas costumbres, antiguos y nuevos amigos… en ocasiones, las personas que ha emigrado, deben encontrar su identidad en un nuevo país, escogiendo qué costumbres mantiene de la cultura de orígen y las suma al país de acogida. Una suma híbrida que enriquezca y permita no renunciar, sino crecer.
Por ello, nuestro equipo intenta, siempre que puede, atender en el idioma materno, en el idioma de las emociones y los pensamientos, de todos aquellos que acuden para menguar su sufrimiento.
Fuente: Centro de Terapia Cognitiva