– En la comparación. Los demás son mejores que nosotros.
– En el miedo. Tienes que cuidarte de todos.
– En las amenazas. Si no haces lo que te digo vas a ver lo que te hago.
– En la rigidez. Así son las reglas de esta casa y no van a cambiar nunca.
– En la culpa. Me haces sufrir. Por tu culpa yo…
– En la angustia. Si te portas mal me voy de la casa. Ahora que venga tu papá ya verás.
– En el futuro. Algún día estaremos bien.
– En el abandono. No existes.
– En el odio y rencor. La familia de tu padre no es buena, siempre me trataron mal y a tí no te querían.
– En el maltrato. Eres un tonto, no sirves para nada. Te quedas sin premio.
– En el pasado. Antes nos iba mejor. En mis tiempos…
– En el castigo. Si sigues haciendo lo que quieres te vuelvo a pegar.
– En la sobreprotección. No quiero que sufras nunca. Hago y haré todo por ti. No te faltará nada.
– En la venganza. Que sufra lo que yo sufrí.
– En la envidia. Seguramente la vecina es prostituta, ¿no viste el vestido que traía?.
– En la queja. Hay hijo, nacimos para sufrir.
Fuente: Gestalt Terapia