Cuando una emoción se te repite constantemente y quieres evitarla, volverá con la misma fuerza. Si hay otra persona involucrada, siente qué parte de ella estás rechazando. Date cuenta de que esa parte es una parte tuya que ahora ves en el otro.
Las partes negadas corresponden a aquello que no queremos ver, aquello que rechazamos, aquello con lo que no nos queremos identificar. En algún lugar dentro de nosotros permanecen latentes, esperando a ser vistas, reconocidas. Al mirarlas de frente, al reconocerlas como nuestras, nos permitimos ser más auténticos, sin restricciones, crecemos como seres humanos.
Isabel Mª Chueco
Picture by Deenesh Ghyczy
Fuente: Gestalt-Be