• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal

Recursos Coaching y Pnl

Usted está aquí: Inicio / Terapia y tratamientos / JUNTOS POR EL ODIO HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE

JUNTOS POR EL ODIO HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE

 

Yo lo amaba, o al menos creía amarlo, pero después de la boda, hace ya siete años, nada fue como yo lo esperaba, si, es vano vivir de ilusiones, como me dice mi psicoanalista, porque luego una pasa por la vida como una desilusionada crónica, lo sé.

Si no tuviéramos tantos ideales acerca de lo que es o no el amor, podríamos otro amor. Cada vez que él hacía algo diferente a mi ideal del amor, que seguramente no era otro que el que yo atribuía a mi madre, me sentía desamada.

Pasaron los años y yo fui envejeciendo prematuramente, las arrugas eran más profundas de lo necesario para rendir culto al tiempo, la amargura las ahondaba más y más, dejé de cuidarme, engordé, abandoné todas las relaciones que producían mi inteligencia, y por tanto, perdí mi inteligencia, me estupidicé irremediablemente y le hacía a él responsable de todas mis renuncias, le repetía sin cesar: lo he hecho por ti.

Me inmolaba aparentemente por él, pero era por mi idea de amor en realidad que lo hacía, lo más duro fue darme cuenta, gracias a una interpretación donde corresponde que se hagan estas cosas, en mi diván, que todos estos años estuve urdiendo mi secreta venganza: si él me había hecho renunciar a mi vida, yo ahora le ibaa dar a él una mujer vieja, gorda, fea, estúpida y me iba a hacer cargo de que esa mujer, que ya no era yo, porque me había quedado sin mi belleza, sin mi inteligencia y sin mi juventud, le acompañara todos los días de su vida, haciéndosela amarga, como yo pensaba que él me la había hecho a mí.

Hasta sentí una cierta alegría malsana cuando lo vi destruido, arruinado, triste, como un alma en pena: había consumado mi venganza.

Pero es una la que renuncia a su propia vida, aunque diga que fue el otro el que se lo pidió. Es una la que decide amordazar su deseo, para decir que es otro el que desea por mí.

Si de renunciar se trata, renuncio a la venganza, vuelvo a las relaciones con los libros y humanos que producían mi inteligencia, vuelvo a intentar sobreponerme al rechazo que mi cuerpo me produce para poder cuidarlo, a veces llego a pensar ¿quién puede querer cuidar un cuerpo de mujer? ¿y quién un cuerpo de mujer vieja?, vuelvo a sentir que puedo amar, además de odiar, un odio como un tibio veneno, que me he estado inoculando día tras día todos estos años, y que poco a poco, ha ido corroyendo mi corazón.

He ido por la vida como una suicida delirante, queriendo matar al otro que era parte de mí, queriendo matarme para matarlo a él. Venganza melancólica a la que hoy renuncio para atarme a la vida, a otras palabras, a otras cadenas de palabras, un camino hacia mi humanidad, hacia mi inteligencia, hacia mi belleza renovada, hacia mi tercera juventud.

Cuadro: Von Stuk. Salomé

Fuente: TERAPIA DE PAREJA Y FAMILIA

Publicado en: Terapia y tratamientos

Copyright © 2023

Utilizamos cookies para ofrecerte la mejor experiencia en nuestra web.

Puedes aprender más sobre qué cookies utilizamos o desactivarlas en los .

Recursos Coaching y Pnl
Powered by  GDPR Cookie Compliance
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Cookies estrictamente necesarias

Las cookies estrictamente necesarias tiene que activarse siempre para que podamos guardar tus preferencias de ajustes de cookies.

Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.

Cookies de terceros

Esta web utiliza Google Analytics para recopilar información anónima tal como el número de visitantes del sitio, o las páginas más populares.

Dejar esta cookie activa nos permite mejorar nuestra web.

¡Por favor, activa primero las cookies estrictamente necesarias para que podamos guardar tus preferencias!

Política de cookies

Más información sobre nuestra política de cookies