Parece sencillo de responder, pero si somos un poco científicos, a lo Dra. Brennan de Bones, no deberían existir. Si nuestro cerebro lógico y cognitivo es el único aceptable por la ciencia, la intuición , la creativitat, incluso las emociones, no deberían existir. Y sin embargo ahí están ¿ o no?
Bién, la ciencia suele pasar de puntillas sobre lo que no entiende o no puede explicar, por evidente que esto sea.
Cada vez más científicos y especialmente neurocientíficos están rompiendo las barreras del concepto de inteligencia. Por un lado estamos descubriendo que nuestro cerebro lógico-cognitivo ( el hemisferio izquierdo para la mayoría de diestros ) no lo es todo, que quizás lo hemos sobrevalorado y que considerándolo » a peso» es menos de la mitad de nuestro cerebro. Descartada ya esa teoría según la cual sólo utilizamos una parte de nuestro cerebro, pues está demostrado que no hay partes sin usar ( por favor, el chiste fácil de política para luego…) nos queda un hemisferio derecho misterioso del que no acabamos de entender como funciona ( porque queremos entenderlo con el hemisferio izquierdo…) del que parece surgir un pensamiento no sujeto a la lógica, que es creativo, que funciona independiente de nuestro lenguaje y del resto del cerebro.
Por otro lado , nuestra neurologia está dotada con un sistema neuronal extremadamente complejo que se halla distribuido por todo el cuerpo en forma de sistema nervioso vegetativo, del cual aún no conocemos bién sus funciones más allá de las físicamente evidentes como la regulación de la digestión o la circulación. Por ejemplo ¿ donde residen las emociones? yo tampoco sé la respuesta a eso, pero si sé y puedo observar objetivamente dónde las siento y no es en la cabeza. Mi «insight» acerca de si algo me gusta o no, o si estoy triste, nervioso, alegre, asustado, etc. no lo siento en el cerebro, ahí mas bién hay «comentario» sobre lo que siento en forma de diálogo interno. Pero dónde siento mis emociones realmente es en mi sistema nervioso vegetativo , especialmente en las zonas con más concentraciones de ganglios de este sistema, es decir en la línea media del cuerpo, entre el mentón y el pubis, y especialmente en las zonas que la medicina oriental denomina chackras, que no por casualidad son zonas con mayor densidad anatómica de ganglios nerviosos. ¿Curioso no? Cuando siento una emoción algo pasa en mi pecho, estómago, etc. que me da una sensación interna que identifico como la emoción. A las emociones les podemos dar distintos nombres, pero para cada uno la sensación interna es inequívoca. No me pregunto si estoy triste o alegre: simplemente lo noto en mi cuerpo, y claro, además pienso sobre ello en mi blablabla interno y evoco memorias relacionadas , etc.
Para acabar de romper los esquemas tenemos el concepto de «cerebro cardíaco», una red neuronal cardíaca que parece que toma sus propias decisiones antes que el cerebro: ¿corazonadas? Puede que sea un centro más de inteligencia somática, o quizás el cerebro somático por excelencia, pero, lo que parece claro que que transmite al cerebro más información de la que recibe de él y que toma sus propias decisiones.
Entonces, ¿quién manda aquí?
Puede que esta pregunta nos lleve a un concepto no aplicable a nuestra neurologia. Puede no mandar nadie, ser una colaboración sinérgica de los distintos sistemas físicos y neurológicos, de manera que lo que pensamos, lo que sentimos y quienes somos no pueda entenderse desde nuestro pensamiento lógico solamente y necesite añadir conceptos no lógicos, inteligencia somática, etc y quizás hasta ir un paso más lejos y salir de nuestra propia neurologia para entrar en la «inteligencia relacional» de la mano de las neuronas espejo, complejo mecanismo que permite interactuar a las neurologias de dos personas de una manera coordinada que todavia no entendemos muy bién. Son las neuronas que hacen una sinapsis funcional con las neuronas de otro individuo. ¿Quizás el síndrome de Asperger, no sea más que un mal funcinamiento de esta sinapsis funcional?
Estas neuronas espejo, implicadas en el reconocimiento de especie, nos sirven para aprender «imitando», para «empatizar», para ponernos en la piel del prójimo, para captar su estado interno de manera inconsciente. Y eso modifica el comportamiento de nuestra propia neurologia a todos los niveles.
Es tiempo de caducar viejos esquemas que ya no encajan con lo observado. Hay mentes cerradas muy reticentes a cambiar patrones, especialemnte en el mundo científico y universitario, que son un verdadero lastre para el avance de la comprensión de la neurologia humana.
Como dijo Einstein: “Los problemas más importantes no pueden resolverse en el mismo nivel de pensamiento que los ha creado”, ¿como vamos a explicar la complejidad de nuestro sistema neurológico usando solo una pequeña parte de él?
Por lo tanto, para entender y explicar como funcionamos no podemos obviar nuestra parte no lógica, atemporal, no espacial, emocional, intuitiva, creativa, abstracta, metafórica, etc. Es como explicar un barco sin tener el cuenta el mar por donde navega. Ni podemos entender nuestras funciones neurológicas sin tener en cuenta el campo de relación donde se produce. Seria como entender un como juega un tenista sin saber que existe alguien al otro lado del campo.
Y a la par de la neurociencia, también la psicologia está muy cerrada a ampliar el concepto de mente. El otro dia , en una comida con psicólogos me comentaban lo poco que se tratan las emociones en la carrera y al fin y al cabo son lo que se encuentran cada día en el trabajo.
Ha llegado el momento de despertar a lo que no podemos explicar todavía y aceptar que está ahí: la mente cognitiva trabajando con la mente somática, la mente relacional y quién sabe qué más, la inteligencia de campo tal vez?. Lo entendamos o no el modelo actual no explica lo que ocurre, ergo, habrá que canviarlo.
Es divertido relacionarse con mentes rígidas y cerradas, tremendamente lógicas y «cerebrales» y decirles: qué sientes en tu pecho cuando te digo » te quiero» o » te odio» , y ¿cómo tu mente lógica explica eso?. Quién escoje nuestras amistades o lo que sentimos por los demás ¿ la lógica? o hay algún otro centro de decisión que no comprendemos bién aún y que es quién lleva el timón y nos hace decidir qué comida me apetece hoy o de qué color me visto, o con qué desconocido me acerco a hablar…
En terapias como la hipnosis o la PNL trabajamos mucho con «esa otra inteligencia», y la gente de repente se siente bién y no entiende porqué ¿ acaso entendían siempre porqué estaban mal? Nuestra mente «no lógica» cambia su funcionamiento y nuestra lógica quiere entenderlo, eso si es una locura.
Cuantas veces nuestra mente lógica no entiende porqué nos sentimos tan mal por una pequeña cosa o porqué nos enamoramos o por qué tomamos decisiones «por una corazonada» y sin embargo así es.
Ser concientes de todo esto ya es un cambio en la conciencia, lo entendamos o no, genera cambios.
Os dejo algunos enlaces para ampliar un poco el tema.
Cerebro cardíaco: ( la Contra de hoy) http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120314/54267641495/annie-marquier-corazon-cerebro.html
Dra. Jill Bolte, hemisferio derecho:
http://www.youtube.com/watch?v=lZKDP_Tm9zo
http://www.youtube.com/watch?v=OKLPL0s6M2Q
Neuronas espejo:
http://www.lavanguardia.com/estilos-de-vida/20120210/54251842692/el-ejemplo.html