He aprendido que cuando se quiere realizar un cambio en el mundo, solo tenemos que tocar sus corazones y hacerles reconocer lo maravillosos que son. Que si se puede cambiar y que si es posible crear la vida que deseamos.
Se gradúan Arianna y Rafael… otros comenzaron y no terminaron y eso también está en orden. Todo a su tiempo. Solo cuando estamos listos o solo cuando ya no podemos más con la situación que vivimos es que estamos dispuestos a realizar un cambio.
A veces es a las 20, a veces a los 30 y a veces mucho más tarde. ¡Pero siempre es maravilloso! Esta vez se gradúa Arianna, una chica joven, emprendedora y lista para cambiar el mundo desde su corazón. Le decía en el cierre que ojalá todos los jóvenes comenzaran una nueva vida con las herramientas que ella se lleva. Con seguridad, mientras más jóvenes tienen estos recursos, más felices serán sus familias.
Pero también estaba Rafael, un hombre de canas y de mucha experiencia, y lo que le agradezco a él es su deseo intermidable por aprender, por continuar… no hay edad para el cambio. «Loro viejo SI aprende a hablar si le da la gana».
Bellos los dos y yo feliz de haberlos tenido conmigo.
Rafael, Elisabeth, Arianna |
Fuente: PNL – Elisabeth Tepper Kofod