Lamentablemente si. Ser un Excelente Profesional, tener una calificaciones notables a lo largo de nuestra carrera universitaria, no garantiza, en ningún caso, por si solo, el éxito de un profesional.
Sea cual sea su carrera, vivimos y trabajamos en organizaciones donde la interacción personal es diaria. Donde nuestra inteligencia y nuestros conocimientos no son nuestro principal activo. Las habilidades sociales son en estos momentos, algo prioritario a la hora de incorporar personal en las empresas.
- Trabajar en equipo
- Capacidad para relacionarse con las circunstancias adversas
- Capacidad de comunicación
- Flexibilidad
- Empatía
- Autoconfianza
- Capacidad para asumir riesgos y tomar decisiones
- Capacidad de liderazgo
- Capacidad de motivación y automotivación.
entre otras…
Y una vez dentro del tejido empresarial, ¿por qué algunos profesionales se estancan, abandonan y otros triunfan y ascienden sin cesar?
Sobretodo, el fracaso de un directivo, de un alto cargo, de un profesional de alto nivel, no se basa en sus conocimientos o habilidades prácticas relacionadas con la materia especifica de la empresa. Sino, por su falta de habilidades sociales, su falta de inteligencia emocional.
¿Qué falla?
– Su falta de habilidad para la Comunicación interpersonal
– Su falta de adaptación a los cambios organizacionales
– Su excesivo afán de protagonismo, el síndrome del yo-yo
– Su parálisis por miedo al fracaso
– Su incapacidad para remontar una mala decisión o fracaso
– Problemas personales no resueltos
Todo esto, hace que un directivo, al encontrarse con una Empresa u Organización, que está creciendo más que el, tenga dos caminos. Crecer más que la empresa, para poder resolver mejor los retos que deberá afrontar, o sucumbir ante algo que se le antoja imposible de controlar.
El Coaching de Directivos, hecho a tiempo, es la herramiento imprescindible para el sano crecimiento de su personal y de la propia organización.
Viki Morandeira
Tu Coach Personal
Fuente: Coaching Para Protagonistas