Actualmente niños, jóvenes y adultos estamos saturados de violencia, de miedo, de inseguridad, de estrés, ya no nos comunicamos como antes de persona a persona, estamos despersonalizados muchas veces. La tecnología ha invadido nuestro espacio y nuestro pensamiento a través de noticieros, telenovelas, que actualmente podrían ser las “hamburguesas del espíritu” y qué decir de las “donas de la imaginación”, las revistas, novelas, videos, mensajes, y otros muchos, que rigen nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestra falta de valores y por ende nuestras acciones.
Nuestra parte espiritual se encuentra desatendida, no le damos la importancia que tiene. Hoy como nunca hay que retomar nuestro interior y darle atención a nuestra mente y a nuestro cuerpo. Cualquier síntoma que tengamos es una comunicación a la que hay que atender. El hablar con esta parte de mi cuerpo que está manifestando algún problema de salud, es como hablarle a mi mejor amigo.
¿Qué tipo de palabras utilizas? ¿Son de enojo, de reclamo porque estás enfermo y no puedes realizar tus actividades? Seguramente, esto te va a perjudicar, porque te estás peleando contigo mismo ignorando que eres tú el causante de lo que pasa y no estás atendiendo la parte que reclama tu atención con amor.
Hay que tener claro que es a UNO MISMO al que le estoy hablando y que si no manejo el amor, me iré deteriorando cada vez más rápido y sin remedio.